Paliativos

Sucede a menudo con los amigos, que los utilizamos como atavío para sortear ciertas complicaciones de la soledad sexual. Y después de un juego previo que nunca dura demasiado, pues algo en el ambiente resuena para indicarnos que la voluntad no es unívoca, se establece el acuerdo. En esa situación los movimientos no son tales, sino sólo sugerencias, pues cualquier insinuación sin paliativos puede desmoronar el encuentro: se juega sin ver, ni oír, ni pensar, para poder olvidar pronto, o para poder fingir mejor que se olvida. Los rostros nunca se encuentran, como si se repelieran; cada quien busca algo en la esquina de la habitación, que siempre parece demasiado lejana, pues en realidad si se busca algo es mucho más al centro del pecho. Mientras, tratan de amoldarse a un ritmo en el que puede perderse todo.
Y el juego sigue, pues no debe quedar algún tipo de energía contenida que sirva más tarde para acentuar la sensación de culpa.
Y si luego se encuentran, son esquivos. Y si no se encuentran, tratan de buscarse.
Cumplen el ciclo.

2 anotaciones motivantes:

Banjú -el memorioso- dijo...

"[...]Los cuidados paliativos ponen el énfasis en la calidad de vida, es decir, en la paz, la comodidad y la dignidad. Una de las metas principales de los cuidados paliativos es el control del dolor y de otros síntomas para que el paciente pueda permanecer lo más alerta y cómodo posible[...]"

Muy fuertes los momentos así. Terminales sin duda.

Esto que estás leyendo ya no soy yo. dijo...

ya me pasó, buaaaaaaa!