Un día lloviente

Todo está dispuesto, toda acción buena o mala volverá hacia nosotros gracias al arreglo "consciente y premeditado del universo", dicen los que creen en el karma, con esa parsimonia dictatorial que les es característica; y reconocen, tal vez por sugestión o porque de veras tienen razón, los indicios de su destino en cualquier signo.
Un signo se vuelve tal al abstraerse del resto de los elementos que lo circundan para analizarse en su calidad individual, con el fin de asociarse después con el conjunto del que se sustrajo, o con otro, y otorgarle un valor de significado; por lo tanto, es posible hallar un signo del karma en cualquier sitio y a partir de cualquier elemento, haciendo las conjeturas y asociaciones apropiadas.
Como cuando un día uno tiene ganas de encontrarse con el número treinta y dos (porque le dijo la adivina que ése era SU número) y se da cuenta de que está en el precio de la carne en el súper, también en su código de barras, en la placa del carro de su mejor amigo (que vive a un lado de la 32 Oriente), y que su teléfono, al sumar los dígitos individuales también dan tres decenas con dos unidades. Y uno se queda paralizado, pensando que en realidad hay un camino predispuesto y que esa fuerza suprema quiere comunicarse con nosotros a través de esas señas cotidianas... pero podría darse el caso con cualquier otro número. Sólo es necesaria la paciencia par buscarlo.
Al destino, si se le busca, se le encuentra.

3 anotaciones motivantes:

Leo Ávila dijo...

Sí, ya sé. Mi número telefónico no da 32.

beno dijo...

jajaja chingao!! por qué pusiste ese coment? ya se me olvidó lo que tenía en mente... ¬¬

pues así escrito tan bonito hasta me la creería si me dijeras que hay un destino... pero la verdad es que no, no creo en el determinismo

Banjú -el memorioso- dijo...

Wuakala con le destino, !! pero pues ya què pedo, dios quizo que fuera el nuevo rey del mundo muhahahaha :[ y lo dominara con un jercito de zombies adolecentes mutantes, en ropas escasas... espero que la carne putrefacta sigue siendo sexy...

como sea, io tengo tendencia a la apranoia, y si te fijas bien en todo, encontraràs una razón para sospechar, pero como alguien una vez me dijo: Tù y tus pinches ideas pendejas que te formas en tu cabezita loca